Variabilidad proverbial de nuestro ecosistema
Por Mariano Gutierrez*
Un comentario y aporte en relación al conversatorio de ayer, que me pareció muy positivo por la variedad de temas abordados. Sin embargo me llamó un poco la atención la ausencia del tema ambiental, aunque fue tocado como amenaza durante la presentación del mismo, es decir que los objetivos de la iniciativa «Pesca para Todos y por Siempre» van a atravesar serios predicamentos cuando se active a gran escala la variabilidad proverbial de nuestro ecosistema.
Me refiero por ejemplo a que se da por sentado que la anchoveta será siempre una especie de gran abundancia si la cuidamos, como acertadamente se sostuvo, aunque creo que la falta de tiempo fue lo que impidió abordar otros temas como aquellos que no está en nuestras manos resolver.
Está pronosticado que llegará a su progresivo final el dominio del ecosistema por parte de la anchoveta, pero al mismo tiempo se espera un incremento de otras especies que por ahora no tienen gran biomasa, como el jurel y la caballa, el retorno de la sardina, la recuperación de la merluza más especies costeras y otras. Esos aspectos no los podemos manejar, pero ya sabemos bastante bien cómo reaccionan los grupos de especies pelágicos, costeros, oceánicos, predadores superiores y otros ante los cambios.
Quisiera sugerir respetuosamente que se organice una jornada de divulgación científica a cargo de Imarpe, entidad que nos da prestigio internacional y que tiene muchísimo por decir respecto a estos temas. El instituto acaba de publicar con auspicio de la FAO, ICES e IRD –y luego de 20 años- un volumen compilatorio en la revista científica «Progress in Oceanography», el cual presenta el estado actual del conocimiento sobre el ecosistema incluyendo las pesquerías. Este es un gran logro lamentablemente poco conocido y reconocido en el país.
Se presenta allí por ejemplo, que el ecosistema de Benguela es bastante más productivo que el nuestro a nivel primario, pero que la abundancia de recursos del segundo y siguientes niveles tróficos es bastante menor que en el nuestro. Una de las respuestas parece estar en que en el nuestro hay mucha mayor abundancia de eufáusidos (krill), además de otros aspectos ligados a procesos muy largos de adaptación a un ambiente cambiante, por ejemplo: las aves marinas del Perú son más grandes y robustas que sus parientes de otros ecosistemas, pero también están sometidas a niveles de mortalidad dramáticamente opuestos.
Creo que realmente vale la pena enriquecer el libro: «Perú, país marítimo» que pronto se ofrecerá a los futuros líderes y ejecutivos del país, al adjuntar resúmenes de lo que debemos esperar cara al futuro, que a pesar de lo dicho, es muy positivo tal como anuncian los promotores según artículo editorial de la futura publicación.
* Ingeniero Pesquero. Comentario con motivo del Conversatorio CEEM «Pesca para Todos y por Siempre» del 27 abril 2009.